El partido ya venía caliente de la previa. Mourinho era Mourinho y contagió de su estilo en la sala de prensa hasta al aparentemente impasible Pep Guardiola. El Barça salió al campó con un estilo muy diferente al normal. Los chicos de Pep parecían contagiados por el ambiente tosco de su entrenador el día antes del partido, así se vió en cada pequeña disputa, en cada pequeño choque, estaban siempre encima del árbitro y jugadores del Madrid. Fue así, cuando obviando una primera parte aburrida y sin mucha historia, en el minuto 60 Stark no aguantó más y expulsó a Pepe en la primera entrada dura rigurosa que realizó el portugués. El madridista disputa el balón con la planta por delante en lo que parece una amarilla clara y una roja injustísima. Hasta aquí duró el partido. El conjunto blanco había dispuesto un partido muy similar al de la copa. Ritmo lento, mucha presión y a esperar atrás sus oportunidades. Con diez hombres el F.C. Barcelona se creció y en una buena jugada de Aflellay, previo resbalón de Marcelo, llegó el primer gol del Barça. El equipo blanco, con un Mourinho ya expulsado por protestar en el banquillo, había entregado la cuchara desfondado físicamente con un hombre menos. Todavía hubo tiempo para que Messi pusiera la puntilla a los blancos y prácticamente a la eliminatoria con un gol de crack. Uno, dos y hasta tres jugadores madridistas sorteó para batir en el mano a mano a Casillas. El Barça se apunta el tanto gordo del mes de los clásicos con la polémica ayuda de Wolfgang Stark que no estuvo en ningún momento a la altura del partido. ¿Habría expulsado Pedro Proença a Pepe?El Barça acaricia la final
28 abril 2011 | Por Fran Zaragoza
El F.C. Barcelona tiene un pie y medio ya metido en la gran final de la Champions. Los dos goles del argentino Leo Messi les colocan a un paso de lograr su tercer trofeo europeo en los últimos cinco años. Polémica actuación del alemán Wolfgang Stark que expulsó de forma rigurosa a Pepe en el minuto 60.
El partido ya venía caliente de la previa. Mourinho era Mourinho y contagió de su estilo en la sala de prensa hasta al aparentemente impasible Pep Guardiola. El Barça salió al campó con un estilo muy diferente al normal. Los chicos de Pep parecían contagiados por el ambiente tosco de su entrenador el día antes del partido, así se vió en cada pequeña disputa, en cada pequeño choque, estaban siempre encima del árbitro y jugadores del Madrid. Fue así, cuando obviando una primera parte aburrida y sin mucha historia, en el minuto 60 Stark no aguantó más y expulsó a Pepe en la primera entrada dura rigurosa que realizó el portugués. El madridista disputa el balón con la planta por delante en lo que parece una amarilla clara y una roja injustísima. Hasta aquí duró el partido. El conjunto blanco había dispuesto un partido muy similar al de la copa. Ritmo lento, mucha presión y a esperar atrás sus oportunidades. Con diez hombres el F.C. Barcelona se creció y en una buena jugada de Aflellay, previo resbalón de Marcelo, llegó el primer gol del Barça. El equipo blanco, con un Mourinho ya expulsado por protestar en el banquillo, había entregado la cuchara desfondado físicamente con un hombre menos. Todavía hubo tiempo para que Messi pusiera la puntilla a los blancos y prácticamente a la eliminatoria con un gol de crack. Uno, dos y hasta tres jugadores madridistas sorteó para batir en el mano a mano a Casillas. El Barça se apunta el tanto gordo del mes de los clásicos con la polémica ayuda de Wolfgang Stark que no estuvo en ningún momento a la altura del partido. ¿Habría expulsado Pedro Proença a Pepe?
