

Desayuno en la dieta básica del futbolista
No has de olvidar que la ingesta de alimentos antes del partido y durante su desarrollo es vital para el desarrollo de su musculatura en aras de que pueda alcanzar elevadas reservadas de glucógeno, que se presenta como la principal fuente de energía. Como sucede con cualquier otra persona, en el caso del futbolista el desayuno se presenta como uno de los momentos cruciales de su dieta. La jornada de trabajo de un futbolista está constituida por un intenso entrenamiento para mejorar su resistencia hasta llegar a un partido oficial donde deberá demostrar el esfuerzo realizado días anteriores. En este sentido, el peso de los carbohidratos antes mencionados ha de estar muy presente en forma de pan o cereales. El pan lo podemos preparar como tostadas, que acompañaremos con las proteínas animales que nos pueda aportar un vaso de leche, así como las mil y una vitaminas que nos acerca una pieza de fruta.

Comida en la dieta básica de un futbolista
Durante la comida, hemos de apostar en los primeros platos por los hidratos de carbono para rellenar las reservas de glucógeno, ya sea en forma de patatas, arroces o pasta. Evidentemente, hemos de completar estos platos con una proteína, la cual puede ser en forma de carne, pescado o huevo. Por ejemplo, si optamos por un plato de pasta con tomate, hemos de añadir algo de proteína como trozos de huevo duro, queso o carne picada de pollo y pavo en pequeñas proporciones. También podemos optar por pechugas de pollo, acompañadas de arroz o salmón acompañado de patata. En el caso del pescado, hemos de alternar el azul con el blanco.

Merienda y cena en la dieta básica de un futbolista
Para la merienda, podemos apostar por los bocatas, leche, yogur o frutos secos como las almendras o, incluso, por una pieza de fruta.
